En la provincia de Troms y Finnmark se ubica Tromsø, la mayor ciudad al norte de Noruega. Con más de 70.000 habitantes, la denominada “Capital del Ártico” es uno de los lugares más visitados de Noruega. Cada año miles de viajeros llegan hasta Tromsø para disfrutar de dos fenómenos naturales únicos; las auroras boreales y el sol de medianoche.
La ciudad ha estado habitada desde la Edad de Bronce debido al abrigo natural que le proporciona su especial orografía. Con la cristianización de Noruega hacia principios del siglo XI, en Tromsø se va a erigir la iglesia más septentrional del mundo. El municipio se convertirá en punto de cabecera de la región, destacando como centro religioso. A partir del siglo XIX la ciudad vivirá un gran crecimiento gracias a la actividad pesquera y de caza en las zonas árticas. A finales del siglo XIX, Tromsø se había convertido en un importante centro comercial del Ártico del que se originaron muchas expediciones árticas. Del puerto de la ciudad partirán las principales expediciones noruegas al Ártico llevadas a cabo por los legendarios Roald Amundsen y Fridtjof Nansen. Unas décadas después, Tromsø va a convertirse en capital efímera de Noruega durante la Segunda Guerra Mundial. Tras la guerra la ciudad absorbió a otros municipios cercanos y multiplicó su población. En 1968 se estableció la Universidad de Tromsø, la cuarta mayor universidad de Noruega que cada año recibe a miles de estudiantes.

La ciudad se divide en dos áreas principales; Tromsøya y Tromsdalen. La primera se ubica en la isla del mismo nombre y acoge las principales instituciones del municipio, zonas residenciales, la Universidad de Tromsø y el aeropuerto. Mientras, el barrio de Tromsdalen se sitúa en tierra firme frente a la isla Tromsøya. Ambas áreas están conectadas por el puente de Tromsø, uno de los iconos más conocidos de la ciudad.