Noruega cuenta con dos zonas climáticas:
La primera corresponde a la parte oeste y norte del país. Este territorio tiene un clima oceánico. Es decir, abundantes precipitaciones durante gran parte del año y veranos con temperaturas suaves. Los inviernos no son excesivamente fríos.

La otra zona climática se extiende a la parte interior y este del país. Se caracteriza por tener un clima clima continental, con veranos cálidos e inviernos fríos.

Por otra lado, cabe señalar la importancia de la Corriente del Golfo como factor explicativo del clima noruego. Gracias a este fenómeno, Noruega puede disfrutar de unas temperaturas moderadamente cálidas para la latitud donde se encuentra. Si no fuese por su acción, Noruega tendría temperaturas similares a Groenlandia, que cuento con un clima mucho más gélido.

Para consultar las previsiones meteorologicas durante su estancia en Noruega, se aconseja visitar la web del Instituto Meteorológico Noruego y NRK.

Luz

Noruega es un país que se extiende miles de kilómetros en dirección norte-sur, estando la parte norte del país y la isla de Svalbard, bajo el círculo polar ártico. En estos territorios se produce el fenómeno del sol de medianoche. Es decir, el sol está presente en el cielo las 24 horas del día. En Cabo Norte, el sol no desaparece en el horizonte entre el 10 de mayo y el 31 de julio. En el resto del país, las noches de verano son muy luminosas ya que el sol roza el horizonte de manera muy oblicua. Un ejemplo de ello ocurre en la ciudad de Oslo, situada a más de 1.000 km al sur del círculo polar ártico. Durante las noches de verano es posible leer un libro al aire libre sin necesidad de luz artificial. Parece ser que el célebre escritor ruso Dostoyesvski bautizó este período como "las noches blancas".

Los periodos de gran luminosidad estival contrastan con los oscuros y largos inviernos. En el caso de la la provincia de Finnmark, situada en el extremo norte del país, el sol desaparece completamente por un periodo de dos meses.